Desde la infancia, nos acostumbramos a una técnica de cepillado en particular, por lo que resulta especialmente difícil cambiar un hábito tan presente en nuestro día. Es cierto que mantener unas buenas rutinas de higiene bucodental es aparentemente sencillo, pero, a veces, tendemos a repetir errores de forma inconsciente que pueden llegar a ser perjudiciales para la sonrisa.
En Gabriela Valle Clínica Dental somos expertos en salud oral en Las Palmas y, por eso, queremos darte unos consejos para que lleves a cabo un buen cepillado dental. ¡Te explicamos los errores más comunes!
¿Qué errores debes evitar?
- Cepillar tus dientes nada más terminar de comer: Es un hábito muy frecuente, ¡pero poco recomendable! Es conveniente dejar un margen de entre 20 y 30 minutos entre la comida y el cepillado, de modo que la propia saliva se encargue de neutralizar el pH para proteger al esmalte de los distintos ácidos.
- Amortizar demasiado tiempo el cepillo: Después de los 3 meses de uso, los filamentos del cepillo se deterioran y pierden su eficacia, dejando de eliminar la placa adecuadamente y convirtiéndose en un medio de proliferación de bacterias. ¡Estamos seguros de que no querrás que esté en contacto con tu boca!
- Realizar un cepillado brusco: No solo no es necesario, sino que puede ser bastante perjudicial para el bienestar de tus dientes y encías, llegando a provocar retracción gingival, desgaste del esmalte y sensibilidad dental. Por ello, también es importante no escoger un cepillo demasiado duro, sino que es preferible uno de dureza media para evitar la retracción gingival.
- Cepillarte con movimientos verticales: Aunque es un gesto muy imitado, lo cierto es que es incorrecto. Según la técnica de BASS, recomendada por la OMS, para conseguir eliminar la placa, se deben realizar movimientos circulares y horizontales, colocando el cepillo en un ángulo de 45º. Si repites esta secuencia por todos los dientes, ¡seguro que tu sonrisa estará mucho más limpia!
- Limpiar la lengua con las cerdas del cepillo: Sabemos que es un gesto casi impulsivo, pero las cerdas no están pensadas para actuar con la misma eficacia sobre la lengua, además de que podemos llegar a arrastrar las bacterias de los dientes por toda la superficie lingual. Sí que se pueden utilizar cepillos cuya parte trasera esté diseñada para esta función, aunque nosotros siempre recomendamos el uso de raspadores linguales. ¡Se convertirá en tu complemento favorito!
- Enjuagarte durante demasiado tiempo: Al contrario de lo que se suele pensar, lo ideal es realizar un enjuague rápido que permita que el flúor o la clorhexidina hagan su trabajo. Y, aunque es común ver a pacientes enjuagarse con agua tras utilizar el colutorio, es preferible no hacerlo, ya que así los agentes desinfectantes no pierden su eficacia.
Si cometías alguno de ellos, es el momento perfecto para dejar de hacerlo. ¡Te aseguramos que tu sonrisa te lo agradecerá!
Y si tienes alguna duda acerca de tu salud oral, ¡ponte en contacto con tus expertos en salud oral en Las Palmas y te asesoraremos en todo lo que necesites!